Cómo leer un libro más rápido

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Este post combina pasajes del legendario "Cómo leer un libro" de Mortimer Adler con mis propias opiniones, y espero que sirva para orientar al lector sobre cómo leer libros de forma más inteligente y efectiva.

Pasos a seguir para leer un libro más rápido

El día a día nos quita muchas horas de tiempo y, al final mucha gente termina el día con 15 minutos de lectura antes de ir a dormir.

Si quieres ser más productivo y leer más, las siguientes pautas te aportarán una mayor agilidad y comprensión, además de favorecer que los mensajes claves del libro queden grabados en tu mente.

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Pro Tip: para comprender mejor las ideas clave del libro, te sugiero que busques la entrevista al autor en YouTube o en alguna otra publicación

1. Lectura en diagonal

Te permite conocer el esqueleto y tener una idea general del libro. Esto también proporcionará al lector una comprensión de las ideas y principios principales del libro, así como de la disposición inicial.

2. Lectura Superficial

vuelve a ojear rápidamente todo el libro, pero centrándote más en los detalles, los casos de uso, los hechos relevantes.

3. Crea un índice

cuando hayas terminado de leer, vuelve al principio del libro e intenta resumirlo en un índice. Considéralo como una estructura completa con un plan central y una jerarquía de partes, en lugar de hacerlo página por página o punto por punto.

Una vez terminado este nivel de lectura, debería ser posible responder a las siguientes preguntas:

  • ¿Qué tipo de libro es?
  • ¿Cuál es exactamente el tema principal?
  • ¿En qué orden construye el autor sus pensamientos o su comprensión de ese amplio tema?

En lugar de esquematizar el libro página por página o punto por punto, intenta esquematizarlo como una estructura amplia que quedará reflejada tu propio índice personal.

Por ejemplo, primero los capítulos, seguidos de los ejemplos o casos de uso que apoyen el mensaje, y por último el mensaje central.

4. Haz una lectura normal

Verás como para esta lectura, tu cerebro conoce muchas de las partes que se muestran y tu velocidad será mucho mayor. Esta lectura te dará matices y te premite disfrutar del placer de leer, pero lo más importante ya lo tienes recogido en tu indice.

Este es el momento para iniciar los buenos hábitos de lectura (a continuación).

Mejores hábitos de lectura

Para mejorar tu comprensión y análisis del libro, puedes utilizar los siguientes recursos que complementan el método anterior.

  1. Subraya: haz énfasis en las ideas principales; en las observaciones poderosas o importantes.
  2. Estructura: Para resaltar un texto previamente destacado o para indicar un párrafo demasiado largo para ser subrayado, utiliza líneas verticales en el margen.
  3. Iconos: Debes resaltar las diez o doce frases o oraciones más importantes del texto con una estrella, un asterisco u otro tipo de marginación. Puedes doblar una de las esquinas o intercalar un papel entre ellas si haces marcas idénticas en varias páginas. Cada vez que necesites refrescar la memoria, puedes sacar el libro de la estantería y abrirlo por la página correspondiente. Pon un número al lado de cada afirmación que constituye la base de los argumentos (en orden).
  4. Enumera: El desarrollo argumental del autor se indica con números en el margen. Para indicar en qué parte del libro el autor expone los mismos argumentos, o puntos que son relevantes o contradictorios con los que aquí se destacan, se utilizan números de página en el margen. Esto unifica las ideas de un libro que pueden estar dispersas en muchas páginas.
  5. Señala: Las palabras o frases importantes pueden subrayarse o rodearse con un círculo, lo que sirve para el mismo objetivo.
  6. Anota: Puede resultarte útil hacer anotaciones en los márgenes, en la parte superior o inferior de la página, para llevar la cuenta de las preguntas (y posibles respuestas) que te plantea una sección, para aclarar un argumento complicado o para llevar la cuenta de los temas principales del libro en orden cronológico. Las páginas finales del libro pueden utilizarse para hacer un índice personal de los argumentos del autor en el orden cronológico en que aparecen.
  7. Ideas: Al final de cada capítulo, debe haber un resumen rápido de las ideas importantes.

4 preguntas para hacerte tras leer el libro

Si tu análisis anterior ha sido satisfactorio, estas cuatro preguntas te ayudarán a saber si te falta algo de información o si has captado por completo la esencia del libro.

¿Cuál es el tema principal del libro?

Es importante identificar el tema principal del ensayo, así como la forma en que el autor lo desarrolla descomponiéndolo en sus conceptos o temas básicos subyacentes.

¿Qué se expone y de qué manera?

Debes tratar de averiguar las ideas principales, las afirmaciones y los argumentos que conforman el mensaje distintivo del autor. ¿Qué ejemplos se ofrecen? ¿Qué obras académicas se citan para apoyar las afirmaciones?

¿Es el libro completamente cierto, o sólo parcialmente?

Antes de responder a esta pregunta, debes abordar las dos primeras. Debes comprender lo que se dice para decidir si es cierto o no. Sin embargo, si lees en serio, debes estar preparado para sacar tus propias conclusiones después de terminar el libro. No basta con entender los puntos de vista del autor.

¿A quién le importa el mensaje del libro?

Debes considerar el significado de cualquier información que el libro haya ofrecido. ¿Por qué es necesario conocer estos hechos, en opinión del autor? ¿Es importante para ti conocerlos? Si el libro te ha educado e iluminado, es esencial que busques una mayor iluminación preguntando qué se pretende o recomienda a continuación, qué sigue después, etc.

Cómo hacer una crítica del libro.

Espera a comenzar tu crítica hasta que hayas completado tu esquema y tu interpretación personal del libro.

En las partes en las que no estés de acuerdo, evita el conflicto y la discusión. Intenta ser razonable en lugar de polémico o agresivo. Por supuesto, en la práctica, ganar una discusión es inútil si sabes o crees que estás equivocado, aunque pueda mejorar momentáneamente tu posición social. En cambio, ser sincero es la mejor forma de actuar a largo plazo.

Puedes demostrar que comprendes la diferencia entre el conocimiento y la pura opinión dando buenas razones para cada juicio crítico que hagas. Imagina al lector como participante en un diálogo con el autor, donde tendrá que enfrentarse a los siguientes 4 conceptos:

  • Falta de conocimiento: hay errores lógicos o involuntarios en el texto.
  • Información inexacta: se trata de xponer claramente los puntos ciegos del autor
  • Falta de razonamiento: el autor ha dado algunoas cosas por sentadas cuando requieren mayor razonamiento
  • Deficiencia en el análisis: hay lagunas o falta de información en el análisis

Espero que estas pautas te hayan ayudado a leer de forma más efectiva y sacar mayor partido de tu tiempo. Si te ha aportado valor, compártelo para que otros también lo conozcan.

Hasta el próximo post.